La primera generación de jóvenes españoles nacida en democracia está viendo cómo la crisis económica acaba con sus sueños y sus, hasta hace poco, altas expectativas de vida.
Somos los jóvenes con más formación académica de toda la historia de España, aunque también fueron muchos los que dejaron los estudios en busca de unos ingresos inmediatos. Ahora, gran parte de éstos, viven con trabajos cada vez más precarios o sufren un desempleo, que duplica la media europea.
Después de haberlo tenido todo, nos hemos encontrado con que una crisis global hace tambalear las bases del sistema, y con ello su futuro. Los expertos anuncian que, si no hay un cambio drástico, nuestras condiciones de vida irán empeorando progresivamente y algunos alertan de que nos podemos convertir en una generación perdida.
La mitad de los cinco millones de españoles que se encuentran en paro en España tiene menos de 35 años. En la última semana el INE ha hecho público unos datos muy reveladores: en los próximos 10 años la población española decrecerá por primera vez en su historia uno de los motivos de este decrecimiento es que España esta volviendo a convertirse en un país de emigrantes, miles de jóvenes vuelven a emigrar como antaño pero ahora con cualificación y multitud de títulos. Esto representa una amenaza a largo plazo para España, puesto que pone en riesgo su capacidad para crecer y recuperarse de la crisis, ya que España está perdiendo a sus trabajadores más cualificados, es decir, está comenzando a sufrir una fuga de cerebros.
Mientras, tenemos que ver como políticos tanto de izquierdas como de derechas cada vez hacen más recortes en sectores tan importantes como salud y educación, y en ningún momento tocan sus grandes salarios y pensiones vitalicias, los grandes beneficios de los bancos (que por su incompetencia nos metieron en la crisis) o las SICAV, y además tampoco llevan a cabo ninguna medida para poder crear empleo y dar oportunidades a los jóvenes. De los cuales creo que si se nos diera la oportunidad de aportar cosas, podriamos contribuir en gran medida a cambiar esta situación, pues no es solo una coletilla eso de que somos la generación mejor preparada, es una realidad.
Con medidas tan sencillas como la tasa Robin Hood o Tasa Tobin, una tasa del 0,1% para el intercambio de acciones y bonos y del 0,01% sobre los derivados financieros, se conseguirían al año 50.000 millones de euros anuales en Europa. Si se tomasen más medidas como estas no haría falta hacer recortes tan drásticos como los que se están haciendo y se van a hacer en educación y sanidad.
Tasa Robin Hood
Os dejo un enlace a un documental de Documentos TV en el que se refleja perfectamente la realidad de la juventud española y describe a través de los protagonistas las diferentes posturas que se pueden tener ante la crisis.
Lo protagonistas son ocho jóvenes de entre 20 y 30 años hablan sobre trabajo, paro, política o educación, pero también confiesan sus miedos, sus frustraciones y sus esperanzas en el futuro. Forman una generación que afronta el reto de aprender a vivir en un mundo marcado por la incertidumbre económica y vital, pero también intenta alzar la voz y crear un espacio en mitad de una crisis que ha movido los cimientos de su existencia.
El documental cuenta con opiniones de expertos que analizan el fenómeno y con voces tan autorizadas como la de José Luis Sampedro.
Fuente:
http://www.rtve.es
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